EL TRABAJO DADO POR DIOS ES UNA BENDICIÓN

Introducción.

Hoy se celebra el día internacional del trabajo, fecha que conmemora un derecho que hoy consideramos incuestionable, la jornada la laboral de ocho horas, para esto hizo falta sangre, sudor, lágrimas… y un puñado de muertos. Hoy, 1 de mayo, se celebra el Día del Trabajo en casi todos los países del mundo. Una jornada que ha ido perdiendo su carácter reivindicativo para convertirse en un día festivo sin más, pero que sigue siendo uno de los pilares del movimiento obrero.

La fecha se fijó durante el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional celebrado en París en 1889. La idea era rendir tributo a los Mártires de Chicago, un grupo de sindicalistas que fueron condenados en Estados Unidos por su participación en una huelga que se inició el 1 de mayo de 1886 en todo el país y, en ese estado, se prolongó hasta el 4 de mayo con la sangrienta Revuelta de Haymarket. Tres fueron a prisión y cinco ejecutados en la horca. El fin era conseguir la jornada labora de ocho horas que en 1886 ya establecia la Ley Ingersoll pero que la patronal incumplía, lo que rearmó y movilizó a las organizaciones laborales y sindicales del país.

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En el sermón de hoy veremos 5 enseñanzas respecto al trabajo, cada una de ellas extraídas del contexto bíblico y que son aplicables a nuestra vida diaria.

PRIMERA VERDAD: Dios es un trabajador eficiente.

Creó el cielo, la tierra y el Universo entero en 6 días, pero además descansó el séptimo, enseñándonos con esto a combinar trabajo duro con descanso oportuno. ¿Qué aprendemos? Que debemos ser trabajadores eficientes, excelentes en todo lo que hacemos pero además, lo suficientemente sabios para descansar en los tiempos debidos. El descanso nos permite recobrar fuerzas, ánimos y seguir adelante (Génesis 1:31 y 2:1-2).

SEGUNDA VERDAD: Dios le dio trabajo a Adán no como una maldición, sino como una bendición.

Por tanto, el trabajo lejos de ser considerado algo malo, denigrante o esclavizante, es el medio por el cual podemos ganarnos la vida y dignificarnos como humanos. Cuando trabajamos contentos en el trabajo que Dios nos dio, las horas pasarán volando, nos sentiremos felices y partícipes de la creación de un mundo mejor (Génesis 1:28; 2:15 y 20).

TERCERA VERDAD: Pensamiento Judío v/s Pensamiento Griego (*)

Los judíos pensaban que Dios había creado un mundo a medias, inacabado, imperfecto, no porque no pudiera, sino para darle la oportunidad al ser humano de contribuir a la creación, acabándola, perfeccionándola; es por tanto un acto de amor de un Padre hacia sus hijos pues quiere darles una lección, la lección de la proactividad. El judío por tanto se siente un co-creador, un “actor” de la creación divina.

Los griegos pensaban que los dioses habían creado el cosmos completamente perfecto, sin fallas, sin nada que hacer cuya única responsabilidad del ser humano era contemplar la creación convirtiéndose así en un “espectador”.

(*) Este postulado -pensamiento judío V/S pensamiento griego-, lo puedes encontrar en mi libro «Creados para Crecer, Creados para Emprender», donde lo desarrollo a profundidad. Visita mi vitrina virtual donde exhibo éste y mis otros libros en versión PDF: https://sellfy.com/gabrielgil

CUARTA VERDAD: Aunque seas Pobre en tu campo hay abundancia de Pan.

En el libro de Proverbios encontramos una verdad no muy entendida quizá porque no ha sido bien interpretada y dice así: “En el campo del pobre hay abundancia de pan, pero se pierde por falta de justicia” (Proverbios 13:23). Dos verdades aprendemos aquí:

1ª) La gente pobre tienen abundancia de pan en su campo, es decir, abundancia de oportunidades. Quizá pocas oportunidades financieras, pero sí ideas, inventos, herramientas, habilidades, productos, servicios, negocios potenciales. ¿Saben por qué? «por que el hambre es la madre de la inventiva».
2ª) Pero mucho de este pan (oportunidades) se pierden por falta de justicia: La ausencia de justicia aquí es doble, es tanto externa como interna. a) Injusticia Externa: Se refiere a la injusticia sistémica (corrupción de los sistemas, los ricos se aprovechan de los pobres, leyes coludidas, el sistema es opresor con los pobres, etc.); b) Injusticia Interna: es decir, falta de proactividad de cada individuo. Cuando no hay iniciativa el pan se pierde porque no se trabajó en él, lo mismo pasa con las oportunidades, cuando éstas no se trabajan, potencian, maximizan, se desvanecen o bien, otros la aprovechan.

QUINTA VERDAD: El Trabajo bien hecho te permite vivir Mejor

En 2ª Reyes 4:1-7 encontramos el caso de una mujer cuyo marido había muerto y la dejó con deudas tan grandes al punto que los acreedores iban a quitarle a sus hijos para convertirlos en esclavos (una práctica aberrante pero común en esos tiempos). Pero esta viuda hizo algunas cosas que nos vendría bien imitar:

Buscó ayuda en la persona correcta (“Si vas a comenzar una panadería no le pidas consejo al ferretero de la esquina”).
Siguió el consejo de su mentor
Inició una fábrica de aceite de olivos y luego vendió el producto, pagó sus deudas y vivió de las ganancias. Esto se conoce como «emprendimiento».
El caso de la viuda nos deja algo claro: “Todos tenemos aceite para vender, ya sea una idea, una habilidad, una destreza, un servicio, un producto…, ¿cuál es tu aceite? ¿estás vendiendo?”.

¡Feliz día del Trabajo!

Por Gabriel Gil Arancibia. Coach integral sistémico y mentor de vidas, de profesión teólogo, de vocación pastor. Además es escritor (ha escrito tres libros y un cuarto en camino). Su Propósito en este mundo es “guiar a las personas hacia Dios ayudándolas a mejorar sus vidas”.