La regla espiritual de medida por medida

Siempre pagamos con sufrimiento los sufrimientos que les causamos a los demás (medida por medida). Pero no todos se dan cuenta de esta regla espiritual, algunos la encuentran absurda, hay quienes sostienen que es pura coincidencia, otros, los más acertados (pero no del todo), la llaman ‘karma’, que es una creencia popular parecida a ‘medida por medida’, pero no tiene la profundidad espiritual y asidero bíblico de esta última.

Ejemplos de MEDIDA POR MEDIDA: Si haces llorar a otros, desde el Cielo te harán llorar a ti (te llegan decepciones, traiciones, malas noticias); si golpeas a tu prójimo, te golpearán a ti (sufrirás accidentes, golpes en tu cuerpo, tropiezos mientras caminas); si produces alguna pérdida financiera a alguien, te harán pagar de tu propio dinero (recibirás estafas, multas, cobros inesperados, pierdes plata del bolsillo).

Esta regla —medida por medida— es madre de otra regla espiritual, ‘la siembra y la cosecha’ (ambas se complementan). Sin embargo, también funciona al revés. Ejemplos: Si provocas alegría a alguien, desde el Cielo te alegrarán (recibirás buenas noticias, se te resolverán problemas, alguien te subirá el ánimo); si das tu dinero en limosnas, Dios te lo devolverá con intereses (recibirás un aumento, alguien te pagará una deuda que creías perdida, encontrarás dinero en la calle); si haces el bien a los demás, te llegarán cosas buenas desde Arriba (encontrarás estacionamiento fácil, te librarás de un accidente, recibirás una invitación especial, serán amables contigo, tus mascotas estarán sanas).

La regla ‘medida por medida’ es un recurso espiritual que el Creador usa para «pagar nuestras acciones según hayan sido». Si éstas son buenas, nos vienen recompensas de todo tipo y según la naturaleza de la acción realizada; si son malas, nos llegan sentencias, también según el nivel de la mala acción. Sé que para algunos esto es difícil de digerir, lo cierto es que esta regla funciona… la sepan discernir o no.

Un viejo maestro enseñó:

«El Creador con frecuencia emplea el método de ‘medida por medida’ para enseñarle a una persona la causa por la que sufre, o por la que le llegó bendición. Por ejemplo, un conductor de taxi que ocultó las ganancias a sus supervisores, se encuentra de pronto con dos llantas desinfladas y una multa que se apresura el día siguiente por la mañana a arreglar y pagar, haciéndole perder la suma exacta que había ganado trabajando ilegalmente. Otro ejemplo: un empleado que fue acusado injustamente de robo por su empleador y despedido, pero no abrió su boca para quejarse, en cambio mantuvo su fe en Creador, al poco tiempo encuentra un mejor trabajo con doble de sueldo que el que recibía antes. El modo de obrar del Todopoderoso de “medida por medida” no es un castigo; es un método Divino de educación, es la forma perfecta y equilibrada de enviar juicio o salvación a los mortales. En la medida que el hombre se conduce, con esa misma medida el Creador se conduce con él» (Rab Shalom Arush).

Los dejo con algunos pasaje escriturales que los ayudarán a entender mejor esta verdad:

➡️ «Él paga a cada uno según sus obras; hace que cada cual reciba lo que merece» (Job 34:11 DHH).

➡️ «Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán a medir» (Mateo 7:2 JBLS).

➡️ «El alma generosa será prosperada, y el que riega será también regado» (Proverbios 11:25).

➡️ «Y no nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos, segaremos» (Gálatas 6:9).

➡️ «Dales conforme a su obra, y conforme a la perversidad de sus hechos; Dales su merecido conforme a la obra de sus manos» (Salmos 28:4).

by Gabriel Gil